Una sentencia archivada ...

A veces tratamos de no ser crueles, tratamos de borrar un juicio que de verdad ya ha sido dado dentro de nosotros. Tratamos de apelar una sentencia de muerte para alguien, que en el fondo sabíamos justa, pero externamente se veía muy mal. Tratando de perdonar, aunque en el fondo no queremos. Tratando de aparecer clemente aunque uno sabe que la sentencia ha sido dictada.

Vivir esperando ese perdón, esa apelación a esa sentencia de muerte puede ser peor para todos que simplemente dejar que las cosas sigan el curso que tenían que tomar, aunque parezca cruel, aunque sea doloroso. Es una lección que todos debemos pasar.

Dignidad

Cuando tú te preocupas por la dignidad ajena es que no tienes dignidad propia. La dignidad es algo q se lleva en el centro del ser. Si alguien te la ha arrebatado, no ganas nada con recriminarte a ti mismo por haberla perdido. En esos casos solo Dios te puede devolver la dignidad que has perdido. No te preocupes por la dignidad ajena, ni por la dignidad de Dios, que Dios cuida su propia dignidad de maneras que tú nunca entenderás. Cuida tu propia dignidad. La dignidad es un estado de ánimo, que ni se compra, ni se aprende. Eso ya viene en nosotros. Pero somos muy capaces de olvidarla o cambiarla por cosas muy, pero muy inferiores. Tu dignidad es tu porte, tu dote, para ti y para tus hijos. Cuida tu dignidad. Enseña a los demás a cuidar su dignidad. Es mi mensaje para hoy.

La medicina del lobo

El Lobo representa al rastreador, al buscador. Es leal y con un fuerte sentido familiar y grupal, pero también con un marcado instinto de libertad e individualidad. El Lobo es el precursor de lo nuevo; su intuición le guía.

Si el Hermano Lobo aparece en tu vida, quizás te esté indicando que, pese a tu lealtad a tu manada, no debes renunciar a tu propia identidad e independencia. El Lobo te pide que busques espacios apartados en la Naturaleza donde puedas contactar con tu maestro interior, con tu verdadero yo. Más tarde, puedes regresar a tu clan y compartir con ellos él hallazgos.

El Hermano Lobo nos enseña a equilibrar ambos aspectos de nuestro ser, el familiar y comunal, y nuestra profunda necesidad de libertad y espontaneidad.

¿En qué tramo del camino de tu vida te encuentras en estos momentos? ¿Es el tiempo de regresar a la manada o el de empezar a caminar solo?... Escucha al Hermano Lobo, su Medicina te sanará.

D E S E O

la fiebre del deseo

es mi enfermedad,

la calma del sueño

...

la encuentro solo en tus brazos,

y estando sólo

no entiendo más al mundo

como una fuerte marea

en mi mente, en mis manos

en tus besos de rosa está el néctar de la vida,

y el cielo está a mi lado,

cuando respiro junto a tu pecho.

en este absurdo sin fin,

la tierra tiembla cuando grito tu amor

las sombras palidecen cuando ¡por fin!

te acercas a mi,

como una visión del tierno amanecer,

sobrio y limpio,

después de una noche

de placeres indómitos

y búsquedas desesperadas.

Espíritus Mortales

Cierta confusión parece haberse creado en torno al espíritu, que muchos ven como la parte inmortal del ser... Pues en mi entendimiento los humanos nacemos con espíritus mortales. Creo que la división entre materia y espíritu ha llegado a tal punto que se pretende hacer del espíritu lo supremo. Es mentira, en mi parecer. Si huimos a la muerte y queremos escapar al dolor es señal de que nuestro espíritu ES mortal. Dirán unos "pero esos son instintos". ¿Y acaso los instintos no nos mueven, no nos dan vida? ¿Acaso podemos escapar de la muerte?

Incluso la Sagrada Biblia habla de la muerte del espíritu, de su destrucción. ¿Entonces qué?

Seguro, hay también lo trascendental, pero no sé si llamarle a eso espíritu. Más bien es para mi la historia, lo intemporal, lo que permanece.

Juzgando

Qué puedes juzgar y qué no?

Puede un hombre juzgar mejor que una mujer sobre asuntos de mujer? lo que es mejor para una mujer?

O puede una mujer juzgar mejor lo que es mejor para un hombre que un hombre?

Los juicios, los criterios siempre son personales. Y siempre son aprendidos y heredados, hasta que comienzas a juzgar por ti mismo.
Además no debes juzgarte a TI MISMO bajo criterios ajenos a ti. Los adultos no hacen eso.

Llevo

llevo las huellas que me dejó el amarte ...
eramos dos de un mismo palo ...
pero tú eras más bella y yo más tonto ...
quise reformarme por ti ...
porque sabía que te irías o yo me iría y sería demasiado temprano ...
quise tenerte para siempre y para siempre estás ahí donde nunca estaré ...